Domingo, 13th noviembre, 2011
El ciclismo es así, hoy te sientes bien y mañana puede que estés en problemas para terminar. La etapa de hoy fue extremadamente dura para mí, no hay mucho que pueda contar, desde la salida en San Miguel de Naranjo ataques iban y venían, me encontré en una de esas situaciones en que no sabes si montar plato, si llevar todos los cambios abajo en sencillo o incluso como sentarse. Solo me agarraba para salir.
Pasamos frente a Palmares, San Ramón, y en el premio de montaña de Santiago muchos nos quedamos descolgados, es como ir en fuga pero al revés, mismo desgaste, se sufre y es como ir nadando sin un destino conocido. La etapa para el equipo no estaba siendo muy buena, Eduardo Garita se nos retiró, ya que desde la mañana no se sentía bien y el calor más los kilómetros lo terminaron de hundir. El iba conmigo persiguiendo en ese momento pero yo quise seguir, la tarde era joven todavía, faltaban unos 80 kms para terminar.
Hoy Omar, Vinicio, Orlando, Salazar y Rodríguez intentaron ir en fuga al inicio de carrera pero fue imposible, pero bueno, ya otro día de protagonismo era pedirle peras al olmo. Colombia controlando como un “autobús” y el JPS y Citi tratando de pegar fuga a como diera lugar.
En total de los 11 de ROES solo 5 quedaban en el grupo principal, y yo no le encontraba forma al día. En la mañana hablaba con Vladimir, que si se sentía bien podía anticipar la subida de barranca, pero escapándose después del retorno, donde el viera un lugar indicado, ya que si se esperaba le quedaría más difícil. Cuando me topé al grupo (ellos ya daban el retorno, yo iba unos minutos atrás) la situación de carrera era Nieves Carrasco (JPS) y el mexicano Florencio Ramos escapados, y ya la etapa se veía en un estado de confort para todos, y sobre todo para el líder colombiano Argiro Ospina.
Antes de llegar a barranca, faltaban 6 kms a meta y la fuga principal estaba apenas a 1 minuto, Vladimir Fernández (ROES) atacó, con la intención de ganar la etapa. Sí, un ciclista de un equipo pequeño intentaba plasmar un sueño y convertirlo en realidad. Dice que en la subida ya veía a los dos escapados, pero que también escuchaba las sirenas del grupo principal en su espalda, ahí lo que pedaleaba era la adrenalina, porque fuerza ya era poca. Al final no pudo alcanzarlos, y se queda con la miel en los labios a 20 segundos del primero, y el grupo a 25 segundos detrás de él. Nos salvó la etapa en un honroso tercer lugar.
Mañana día durísimo de montaña con salida en Oreamuno y subir la respetada Santa Cruz de Turrialba. Después de hoy quedan apenas 67 ciclistas, 6 corredores están fuera, entre retirados, fuera de tiempo clasificatorio y sanciones. Así que la grupeta se reduce. A ver como estoy mañana, espero amanecer mejor y sobrevivir otro día.
Saludos.
José Chacón. Equipo Almacenes ROES – Colchones Selther.
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